Santa Águeda: protectora terremotos e incendios.
San Agustín: Protector de los teólogos.
San Alfonso María ligorio: protector de los abogados.
San Ambrosio: Protector de apicultores y fabricantes de velas.
San Joaquín: se le invoca para casarse por la iglesia.
Santa Ana: se le invoca para tener un buen parto y para tener un matrimonio exitoso.
Beata Ana Maria Taigi: patrona de las madres de familia.
San Andrés: Patrón de los pescadores
San Antonio Abad: Patrón de los que sufren herpes.
San Antonio Maria zaccaria: Patrono de los médicos.
San Antonio De Padua: Patrón de los enamorados, se le invoca para conseguir novio.
Santa Bárbara: Patrona de los bomberos, arquitectos, artilleros, se la invoca contra los rayos.
Santa Beatriz de Silva: Patrona de las religiosas de la inmaculada concepción, protege la pureza del cuerpo, mente y corazón.
San Benito Abad: Protector de los mineros, de los alumnos y contra las enfermedades de la piel.
San Bernardino: protector de los publicistas, es invocado contra las hemorragias.
Santa Bernardita Soubirous: Protectora de los jóvenes la invocan para que les de fuerzas en momentos difíciles.
San Blas: Protector de los locutores y de todos los males de la garganta, se la invoca en casos de afonía y de infecciones en el cuello.
Santa Brígida de Kildare: Protectora de las parturientas y de los niños enfermos, es invocada por los perseguidos.
San Bruno: Patrono de los cartujos, se le invoca en caso de maleficios y posesión demoníaca.
San Buenaventura: Protector de los estudiantes.
San Camilo de Lellis: Patrono de la cruz roja, de los enfermeros y enfermeras, de los hospitales, protector de los moribundos, se le invoca para pedir una buena muerte.
Santa Catalina de Siena: Se la invoca para quitar los dolores de cabeza.
San Cayetano: Protector de los que buscan trabajo, de los negociantes, y le piden ayuda para tener buen éxito en sus empresas.
Santa Cecilia: Patrona de los músicos.
San Charbel: Protector de los que padecen enfermedades cerebro-vasculares.
San Cipriano: Se le invoca pidiendo la liberación de toda acción de demonios.
Santa Clara de Asís: Protectora de Asís, es invocada contra las enfermedades de los ojos.
San Cosme y Damián: Patrono de los médicos y los farmacéuticos, los invocan los que trabajan en balnearios y los enfermos de úlcera.
San Cristóbal: Patrono de los conductores y de los viajeros y se le invoca para tener un buen viaje.
San José de Cupertino: Protector de los estudiantes.
Santo Domingo de Guzmán: Protector de los miembros de la orden dominicana.
San Domingo Savio: Protector de los jóvenes cantantes.
Santa Eduvigis: Protectora de las monjas cistercienses del monasterio de Trebnitz
San Elías: Protector de la peste y de la sequía.
San Enrique: es invocado por los jefes de estado, y gobernantes, que le piden sabiduría para guiar las naciones.
San Expedito: Se le invoca para los casos muy urgentes.
San Ezequiel Moreno: Protector de los enfermos, especialmente de los que padecen cáncer.
San Felipe neri: Protector de la juventud, se le invoca para quitar la depresión.
San Fernando: Protector de los hombres del gobierno y de los pobres.
San Francisco de Asís: Protector de los pobres, de los comerciantes y de la ecología.
San francisco Javier: Protector de los jesuitas de los misioneros y de los marinos.
Santa Gema Galgani: Patrona de los farmacéuticos, perdida de parientes y tentaciones.
Santa Genoveva: Se la invoca en casos de viruela y en situaciones de hambre y pobreza.
San Gerardo: Protector de las madres, especialmente de las parturientas que tienen problemas en los embarazos.
San Gregorio Magno: Protector de los músicos.
San Ignacio de Loyola: Es invocado por los militares, es patrono de los jesuitas, de los ejercicios espirituales y se pide su ayuda contra los escrúpulos.
Santa Isabel de Portugal: es invocada en las enfermedades de la piel.
San Isidro Labrador: Protector de los campesinos se le invoca para tener buenas cosechas.
San Jorge: Protector contra las enfermedades venéreas y de la piel.
San José: Protector de los carpinteros, de los artesanos y de los leñadores.
San José de Cupertino: Protector de los estudiantes.
San Juan de Dios: Protector de los hospitales de los enfermeros y enfermeras y de los bomberos.
San Juan Evangelista: Es invocado por los artistas teólogos y escritores además es el protector de la amistad verdadera de los tipógrafos y de los cartógrafos.
San Judas Tadeo: Se le invoca en los asuntos desesperados y en los casos imposibles.
Santa Justa y Rufina: Protectoras de los alfareros.
San Lázaro: Es invocado por los leprosos, por las órdenes hospitalarias y por las victimas de la peste.
San Leonardo: Protector de los presos.
San Lorenzo: Protector de los fogoneros, bibliotecarios y cocineros.
Santa Lucia: Patrona de los ciegos, de los oculistas y de los conserjes, protectora de la vista y se la invoca en enfermedades relacionadas con los ojos.
San Luís Gonzaga: Patrono de la pureza juvenil, se le invoca en dolencias pulmonares.
San Marcos: Protector de los farmacéuticos, pintores, interpretes secretarios y notarios.
Santa Maria Magdalena: Protectora de los peluqueros, perfumistas y de los jardineros.
Santa Marta: Patrona del personal de servicio domestico, de los camareros, de los hoteleros y de los cocineros.
San Martín de Porres: Patrono de los barberos y de los barrenderos, lo invocan todos los enfermos.
San Martín de Tous o de Loba: lo invocan soldados, pobres y mendigos.
Santa Mónica: Protectora de las viudas y de las madres afligidas.
San Nicolás de Tolentino: Protector de las almas del purgatorio. Es invocado para pedir el pan y la libertad.
San Onofre: Protector de los tejedores y de los que quieren conseguir casa propia.
San Pablo: Es invocado en caso de tempestad, también se le invoca en las mordeduras de víbora.
San Pancracio: Es invocado contra los perjurios y falsos juramentos, y para conseguir trabajo.
San pascual Baylon: protector de la adoración nocturna lo invocan los pastores.
San patricio: protector de los barberos, mineros del ganado, se le invoca para la liberación de las almas del purgatorio.
San Pedro Apóstol: Protector de los pescadores, panaderos. Es invocado contra la posesión diabólica y las desavenencias matrimoniales.
Santa Rita de casia: protectora de los imposibles y de las mujeres que desean un hijo.
Santa Rosa de Lima: Patrona de los floristas y jardineros.
Santiago Apóstol: Protector de la caballería y de los movimientos sísmicos.
Santa Silvia: Protectora de las personas que padecen enfermedades del aparato digestivo, especialmente del estomago.
San Tarsicio: Patrono de los niños, se le invoca contra las enfermedades del pecho.
Santa Teresa de Jesús: Se la invoca pidiendo la gracia de saber rezar.
Santa Teresita: Patrona de las misiones y de los aviadores, la invocan los que desean gracias especiales.
Santo Tomas Apóstol: Es invocado por los arquitectos y constructores.
Santo Tomas de Aquino: Lo invocan los teólogos es considerado protector de los universitarios de los filósofos y de los estudiantes.
San Valentín: Protector de los novios y cónyuges.
Santa Verónica Giuliani: Es invocada por las enfermedades eruptivas.
San Agustín: Protector de los teólogos.
San Alfonso María ligorio: protector de los abogados.
San Ambrosio: Protector de apicultores y fabricantes de velas.
San Joaquín: se le invoca para casarse por la iglesia.
Santa Ana: se le invoca para tener un buen parto y para tener un matrimonio exitoso.
Beata Ana Maria Taigi: patrona de las madres de familia.
San Andrés: Patrón de los pescadores
San Antonio Abad: Patrón de los que sufren herpes.
San Antonio Maria zaccaria: Patrono de los médicos.
San Antonio De Padua: Patrón de los enamorados, se le invoca para conseguir novio.
Santa Bárbara: Patrona de los bomberos, arquitectos, artilleros, se la invoca contra los rayos.
Santa Beatriz de Silva: Patrona de las religiosas de la inmaculada concepción, protege la pureza del cuerpo, mente y corazón.
San Benito Abad: Protector de los mineros, de los alumnos y contra las enfermedades de la piel.
San Bernardino: protector de los publicistas, es invocado contra las hemorragias.
Santa Bernardita Soubirous: Protectora de los jóvenes la invocan para que les de fuerzas en momentos difíciles.
San Blas: Protector de los locutores y de todos los males de la garganta, se la invoca en casos de afonía y de infecciones en el cuello.
Santa Brígida de Kildare: Protectora de las parturientas y de los niños enfermos, es invocada por los perseguidos.
San Bruno: Patrono de los cartujos, se le invoca en caso de maleficios y posesión demoníaca.
San Buenaventura: Protector de los estudiantes.
San Camilo de Lellis: Patrono de la cruz roja, de los enfermeros y enfermeras, de los hospitales, protector de los moribundos, se le invoca para pedir una buena muerte.
Santa Catalina de Siena: Se la invoca para quitar los dolores de cabeza.
San Cayetano: Protector de los que buscan trabajo, de los negociantes, y le piden ayuda para tener buen éxito en sus empresas.
Santa Cecilia: Patrona de los músicos.
San Charbel: Protector de los que padecen enfermedades cerebro-vasculares.
San Cipriano: Se le invoca pidiendo la liberación de toda acción de demonios.
Santa Clara de Asís: Protectora de Asís, es invocada contra las enfermedades de los ojos.
San Cosme y Damián: Patrono de los médicos y los farmacéuticos, los invocan los que trabajan en balnearios y los enfermos de úlcera.
San Cristóbal: Patrono de los conductores y de los viajeros y se le invoca para tener un buen viaje.
San José de Cupertino: Protector de los estudiantes.
Santo Domingo de Guzmán: Protector de los miembros de la orden dominicana.
San Domingo Savio: Protector de los jóvenes cantantes.
Santa Eduvigis: Protectora de las monjas cistercienses del monasterio de Trebnitz
San Elías: Protector de la peste y de la sequía.
San Enrique: es invocado por los jefes de estado, y gobernantes, que le piden sabiduría para guiar las naciones.
San Expedito: Se le invoca para los casos muy urgentes.
San Ezequiel Moreno: Protector de los enfermos, especialmente de los que padecen cáncer.
San Felipe neri: Protector de la juventud, se le invoca para quitar la depresión.
San Fernando: Protector de los hombres del gobierno y de los pobres.
San Francisco de Asís: Protector de los pobres, de los comerciantes y de la ecología.
San francisco Javier: Protector de los jesuitas de los misioneros y de los marinos.
Santa Gema Galgani: Patrona de los farmacéuticos, perdida de parientes y tentaciones.
Santa Genoveva: Se la invoca en casos de viruela y en situaciones de hambre y pobreza.
San Gerardo: Protector de las madres, especialmente de las parturientas que tienen problemas en los embarazos.
San Gregorio Magno: Protector de los músicos.
San Ignacio de Loyola: Es invocado por los militares, es patrono de los jesuitas, de los ejercicios espirituales y se pide su ayuda contra los escrúpulos.
Santa Isabel de Portugal: es invocada en las enfermedades de la piel.
San Isidro Labrador: Protector de los campesinos se le invoca para tener buenas cosechas.
San Jorge: Protector contra las enfermedades venéreas y de la piel.
San José: Protector de los carpinteros, de los artesanos y de los leñadores.
San José de Cupertino: Protector de los estudiantes.
San Juan de Dios: Protector de los hospitales de los enfermeros y enfermeras y de los bomberos.
San Juan Evangelista: Es invocado por los artistas teólogos y escritores además es el protector de la amistad verdadera de los tipógrafos y de los cartógrafos.
San Judas Tadeo: Se le invoca en los asuntos desesperados y en los casos imposibles.
Santa Justa y Rufina: Protectoras de los alfareros.
San Lázaro: Es invocado por los leprosos, por las órdenes hospitalarias y por las victimas de la peste.
San Leonardo: Protector de los presos.
San Lorenzo: Protector de los fogoneros, bibliotecarios y cocineros.
Santa Lucia: Patrona de los ciegos, de los oculistas y de los conserjes, protectora de la vista y se la invoca en enfermedades relacionadas con los ojos.
San Luís Gonzaga: Patrono de la pureza juvenil, se le invoca en dolencias pulmonares.
San Marcos: Protector de los farmacéuticos, pintores, interpretes secretarios y notarios.
Santa Maria Magdalena: Protectora de los peluqueros, perfumistas y de los jardineros.
Santa Marta: Patrona del personal de servicio domestico, de los camareros, de los hoteleros y de los cocineros.
San Martín de Porres: Patrono de los barberos y de los barrenderos, lo invocan todos los enfermos.
San Martín de Tous o de Loba: lo invocan soldados, pobres y mendigos.
Santa Mónica: Protectora de las viudas y de las madres afligidas.
San Nicolás de Tolentino: Protector de las almas del purgatorio. Es invocado para pedir el pan y la libertad.
San Onofre: Protector de los tejedores y de los que quieren conseguir casa propia.
San Pablo: Es invocado en caso de tempestad, también se le invoca en las mordeduras de víbora.
San Pancracio: Es invocado contra los perjurios y falsos juramentos, y para conseguir trabajo.
San pascual Baylon: protector de la adoración nocturna lo invocan los pastores.
San patricio: protector de los barberos, mineros del ganado, se le invoca para la liberación de las almas del purgatorio.
San Pedro Apóstol: Protector de los pescadores, panaderos. Es invocado contra la posesión diabólica y las desavenencias matrimoniales.
Santa Rita de casia: protectora de los imposibles y de las mujeres que desean un hijo.
Santa Rosa de Lima: Patrona de los floristas y jardineros.
Santiago Apóstol: Protector de la caballería y de los movimientos sísmicos.
Santa Silvia: Protectora de las personas que padecen enfermedades del aparato digestivo, especialmente del estomago.
San Tarsicio: Patrono de los niños, se le invoca contra las enfermedades del pecho.
Santa Teresa de Jesús: Se la invoca pidiendo la gracia de saber rezar.
Santa Teresita: Patrona de las misiones y de los aviadores, la invocan los que desean gracias especiales.
Santo Tomas Apóstol: Es invocado por los arquitectos y constructores.
Santo Tomas de Aquino: Lo invocan los teólogos es considerado protector de los universitarios de los filósofos y de los estudiantes.
San Valentín: Protector de los novios y cónyuges.
Santa Verónica Giuliani: Es invocada por las enfermedades eruptivas.
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